Glenn Close, más allá del Oscar

Pocas veces en la historia de la ceremonia de los Premios Oscar la estrella es quien no lo recibió. Hablamos de Glenn Close actriz incuestionable que se quedó por octava vez en la puerta de la gloria, pero nos regaló una clase magistral de baile

Agencia Excélsior|Ciudad de México.- Pocas veces en la historia de la ceremonia de los Premios Oscar la estrella es quien no lo recibió. Hablamos de Glenn Close actriz incuestionable que se quedó por octava vez en la puerta de la gloria, pero nos regaló una clase magistral de baile. Alegría, talento y un espíritu de baile que sedujo a medio mundo en directo, cuando en la ceremonia de los Oscar se puso a bailar una canción moviendo la cintura como una adolescente. “Me siento tan libre, tan creativa y tan sexual como siempre”, declaró recientemente.

Una clase maestra de baile improvisa- da se convirtió en un punto culminante instantáneo, en una ceremonia dispersa y aburrida. Discursos largos, alfombra roja reducida, aplausos intermitentes, por eso para la gran Glenn Close de 73 años no fue difícil robarse el espectáculo. ¿Cómo? Bailando el éxito funk de 1988 interpretado por De Butt.

Quienes la conocen señalan que en las distancias cortas es un ser entrañable y adorable. Con una educación exquisita, no procede del mundo de la farándula, si no de la alta sociedad, su padre el doctor William Taliaferro Close era uno de los principales investigadores en la lucha contra el sida. Fue médico personal de Mobutu, dictador de la República Democrática del Congo.

Por parte de la madre, Bettine Moore, era prima de Alessandra Torlonia di Civetella-Cesi, nieta del rey Alfonso XIII de España. En alguna entrevista ha confesado que Katharine Hepburn fue la inspiración para entrar en el mundo del cine. Aunque sus inicios fueron con 35 años, no fue como Liz Taylor que a los 3 años ya bailaba en público. Pero su carrera ha sido intensa y ya es la actriz viva con más nominaciones al Oscar, por octava vez se quedó en la puerta de la candidatura.

Llegó sin prisa a la maternidad, fue madre a los 41, con su hija Annie Starke se presentó en el Festival de cine de San Sebastian, donde se llevó el premio Donostia. En 1991, rodó Amistades Peligrosas. Visitó la Ciudad de México donde quedó deslumbrada y en su instagram relataba su excursión a las pirámides: “Una mañana increíble en las sorprendentes pirámides de Teotihuacán, México. Ni un video ni fotografía pueden comunicar la escala. Me sorprendí de encontrar a tres perros en la punta de la pirámide del Sol. Perros de sol mexicanos”.

Esta “Cruela de Vil” que reinó y nos asustó en 101 dálmatas en realidad es una amante de los animales, en especial de los perros. Colabora en numerosas causas benéficas en defensa de los derechos de la mujer, el matrimonio entre personas del mismo sexo y está comprometida en la lucha para combatir y paliar las enfermedades mentales. Defensora del presidente Joe Biden, es una actriz comprometida. Adora el espectáculo y la música, también a Madonna y aparecer en musicales como el de Sunset Boulevard.

En mayo estrena 4 días un drama sobre drogas que no te deja indiferente, dirigido por Rodrigo García y donde comparte pantalla con Mila Kunis. La historia está basada en hechos reales, que cuando fueron contados mereció el Pulitzer. Y narra los efectos devastadores de las drogas y la relación madre e hija en el medio.

Si queremos recorrer las grandes obras de la carrera cinematográfica de Glenn Close, no puede faltar la película Atracción Fatal con Michael Douglas, después llegó Amistades Peligrosas, El misterio Von Bulow, Hook, La Casa de los espíritus, los críticos coinciden en la cantidad de recursos de esa actriz superdotada que también triunfó en el teatro. Ahora con Hilbilly Elegy, se ha quedado otra vez en la orilla del cielo.

Cuando le preguntan cómo se siente al ser candidata al Oscar y no recibirlo, señala “recuerdo que me sorprendió conocer a algunas personas que sufrían hiperventilación en cuanto iban a ganar o no, y nunca he entendido eso, porque si haces matemática simple, la cantidad de personas que están en nuestros sindicatos, la cantidad de personas que en nuestra profesión están sin trabajo, la cantidad de películas que se hacen cada año, y luego eres uno de los cinco. ¿Cómo podrías pensar en ti mismo como un perdedor?”.