Agencia El Universal|Ciudad de México.- La segunda temporada de «Luis Miguel, la serie» tuvo repercusiones. Una de ellas, a partir de un tema que cruzó prácticamente todos los últimos capítulos: el tinnitus que sufre el cantante se originó tras un accidente en el oído que tuvo durante un show.
Aunque en la serie se menciona que este fue en Lima, no existe claridad sobre este tema, pero sí se culpa directamente al tour mánager que arrendó un equipo de sonido de bajo nivel que falló en medio del espectáculo.
En la serie, el argentino Juan Ignacio Cane interpreta al profesional que se menciona en la ficción como Joe y que es José Pérez, quien existió en la vida real y tras verse retratado como un inescrupuloso estafador anunció que demandaría al artista y a todos quienes resulten responsables de ensuciar su imagen.
«José Pérez manifiesta sentirse traicionado y ofendido por la proyección negativa que se le está dando», señaló el abogado de Pérez, Carlos Ruiz, y agregó que tampoco se pidió autorización para ocupar el nombre de su defendido.
Luis Miguel no se ha pronunciado por el impacto de esta nueva entrega y, según trascendió, habría pasado gran parte de las últimas semanas en Acapulco con su nueva amiga, la modelo argentina Mercedes Villador.
Hace algunas semanas, Ignacio Cane, el actor tras el tour mánager, comentó que si bien el personaje se llama José Pérez «no está inspirado en una sola persona, sino en varias que rodearon a Luis Miguel».
El eterno solitario
Si en la primera entrega de la serie se retrata a un niño y posterior joven Luis Miguel explotado por su padre, Luis Rey, encarnado por el actor Óscar Jaenada, en este ciclo la historia, visada por el propio intérprete de «La incondicional», confirma la constante soledad en la que vive y las traiciones que ha enfrentado por parte de su entorno y su familia.
De hecho, otra de las decepciones que vive hacia el final de la temporada es cuando descubre que su mánager Alejandro Asensi (Mauricio Ambrosi) tiene un romance con su hija Michelle, interpretada por Macarena Achaga. Este fue un idilio real después del cual, según los biógrafos, «Micky» envió a su hija a estudiar a Londres para separarlos.
La serie también mostró la pésima relación con su abuela paterna, Matilde Sánchez, quien peleó por quedarse con la custodia de Sergio, el hermano menor de Luis Miguel, para convertirlo en cantante, a lo que el intérprete se oponía porque no quería que su hermano tuviera su misma vida.
A pesar de que también lo abandonó porque no compatibilizaba con la vida bohemia del artista, se mostró que su pareja más estable fue Érika, interpretada por Camila Sodi. Esta en realidad es la actriz mexicana Issabela Camil, con quien el artista tuvo una relación de siete años. Aunque en la serie él muestra un anillo que le había comprado, cercanos a Issabela han dicho que Luis Miguel nunca quiso casarse.
Camil, en tanto, ha declarado que «fue una historia muy bella» y que no le complica lo mostrado en la serie, pues «no tengo nada que ocultar». También aclaró que su mirada no estuvo presente en los libretos porque no quiso.
En medio de estas revelaciones y anuncios de demandas, se informó que Netflix hará una tercera temporada de la serie, sin entregar detalles de su contenido ni fechas.